

Álvaro Espinosa
Periodista
El movimiento oficialista Acción Democrática Nacional (ADN), que ahora controla la Presidencia de la República y detenta la mayoría en la Asamblea Nacional, tiene un origen que conecta a Daniel Noboa con Leonardo Cortázar, uno de los hombres en la foto de la piscina, procesado por delincuencia organizada en el Caso Encuentro y prófugo de la justicia.
UN PARTIDO RECICLADO CON “ADN” CORREÍSTA
ADN obtuvo su personería jurídica el 23 de mayo de 2024 y cuenta con 230.021 adherentes, de los cuales 161.375 son adherentes permanentes. Su proceso de inscripción en el registro único de organizaciones políticas inició el 13 de octubre de 2023, hasta que el 29 de abril de 2024 los representantes de ADN presentaron 453.721 formularios para la verificación de firmas, estatutos, imagen, autoridades nacionales y locales y sedes físicas en 12 provincias.
En la directiva nacional de ADN, enviada al CNE para su registro, consta como presidenta Beatriz Moreno, administradora de varias empresas del Grupo Noboa e investigada por un presunto delito de tráfico de sustancias ilícitas. Como vicepresidentes del joven movimiento político constan Michele Sensi Contugi, director de Inteligencia y exministro de Gobierno, y la primera dama, Lavinia Valbonesi.
Pero el repentino surgimiento de este “joven” movimiento no estuvo exento de problemas. Bolívar Espinoza Jácome, representante legal de Alianza Democrática Nacional (ADN) denuncia haber sufrido múltiples inconvenientes para la inscripción de su movimiento y acusa al actual movimiento oficialista ADN del presidente Daniel Noboa de usurparle las siglas.
Antes de que Acción Democrática Nacional pasara a manos de Noboa, la organización ya había participado informalmente en las presidenciales 2021, como una plataforma de respaldo al correísmo, pues originalmente perteneció a Leonardo Cortázar, procesado por delincuencia organizada en el caso Encuentro y prófugo de la justicia.

Un año después, Noboa adquirió ese movimiento, modificó su imagen y desde octubre de 2022 inició recorridos hasta que se perfeccionó en la segunda vuelta de 2023 y durante su breve periodo de gestión extraordinaria en Carondelet.
Sin embargo, hasta ese entonces quedaban vestigios del uso que le dio Cortázar al movimiento y sus redes sociales. De hecho, la página de ADN de Noboa, en sus inicios, redirigía a la cuenta de YouTube del ADN de Cortázar, en donde están colgados videos de respaldo al correísmo.
En ese sentido, el 25 de junio de 2023, la Dirección Nacional de Organizaciones Políticas informó a Espinoza, en respuesta a un pedido de información, que a esa fecha se encontraban en proceso de inscripción dos organizaciones políticas con las siglas “ADN”.
La primera era la del presidente Noboa, representado por Moreno Heredia, que se encontraba en etapa de entrega de clave. La segunda era la de Espinoza, que estaba estancada debido a que debía “subsanar requisitos para entrega de formularios”, pese a que esos formularios ya habían sido entregados.

En el marco de las elecciones presidenciales y legislativas de 2023, según Espinoza, Noboa le habría usurpado las siglas y se tomó el nombre de su organización política para la presentación del acuerdo de constitución de alianza.
Ese documento se encuentra firmado por Arturo Moreno Encalada, en representación del Movimiento Pueblo, Igualdad, democracia (PID) Lista 4; también por René Espín Lamar, en representación del extinto Movimiento Verde, Ético, Revolucionario y Democrático (MOVER) Lista 35; y, por último, María Beatriz Moreno Heredia, Procuradora Común de la Alianza Acción Democrática Nacional, ADN.

El problema es que el CNE publicó en sus redes sociales la aprobación de la alianza entre ambas organizaciones como “Alianza Democrática Nacional” y, por si fuera poco, el 5 de octubre de 2023, Sofía Guillen, Secretaria de la Delegación Provincial de Azuay del CNE, le devolvió un oficio ingresado a Espinoza, indicándole que debe sumillarlo la Procuradora Nacional de su movimiento quien, supuestamente, era María Beatriz Moreno Heredia.
Ante ello, Espinoza interpuso una denuncia ante la Fiscalía General del Estado contra Diana Atamaint, Enrique Pita, Elena Nájera, José Cabrera y Esthela Acero, además de Noboa y Moreno Heredia, por el presunto delito de cohecho.
Además, el líder de Alianza Democrática Nacional también presentó una acción de queja ante el TCE por la falta de respuesta del CNE a sus reiterados pedidos.
El 16 de marzo de 2020, el expresidente Lenín Moreno decretó el estado de excepción por la emergencia sanitaria y suspendió la jornada presencial de trabajo y, en concordancia con esto, el CNE emitió una resolución que, en lo principal, disponía la suspensión de plazos y términos de todos los procesos administrativos que se encuentren en trámite hasta que finalice el estado de excepción.
Por ello, Espinoza advierte que el órgano electoral no atendió la solicitud que ingresó el 6 de marzo de 2020 para la entrega de una copia certificada de toda la carpeta de Alianza Democrática Nacional.
En respuesta, el denunciante contó a LA DEFENSA que el 1 de junio de 2020, a través de un correo electrónico de la Secretaría General del CNE, se enteró que la Dirección Nacional de Organizaciones Políticas, el 13 de marzo de 2020, ordenó se remita a la Secretaria General del CNE toda la documentación en original (107 fojas), que corresponden al Movimiento Alianza Democrática Nacional (ADN).
En ese correo se aclara, además, que la documentación no había sido enviada a la Secretaría General por las restricciones de movilidad, sin embargo, cuando Espinoza fue a retirar la documentación de su movimiento, le entregaron documentación que correspondía al movimiento Acuerdo Democrático Nacional.
Por si fuera poco, el representante de Alianza Democrática Nacional reclama que, pese a que los efectos jurídicos del estado de excepción y la resolución del CNE ya fenecieron, todavía no se le habilitan los términos para concluir con la recolección de firmas. Según Espinoza, restaban 25.000 firmas para cumplir con lo requerido y concretar su inscripción.
LA CAMPAÑA DE ADN POR EL CORREÍSMO EN 2021
Un informe del denominado Frente Parlamentario Anticorrupción (FPA), elaborado en marzo de 2023, señala que Leonardo Cortázar incursionó en la política en 2017, con el extinto movimiento político “Libertad es Pueblo”, que lideraba Gary Moreno Garcés, hermano del expresidente Lenín Moreno.

Según los entonces legisladores miembros de esa agrupación, Cortázar llegó a ser dirigente provincial de Libertad es Pueblo y participó activamente en septiembre de 2020, hasta que esa organización fue eliminada con base en un informe de la Contraloría General del Estado que identificó inconsistencias en las firmas presentadas para su inscripción.
Luego de ello, continúa el informe, Cortázar se cambió de camiseta y decidió fundar el movimiento Acción Democrática Nacional (ADN) que, tal como lo describen en la cuenta de X originalmente creada, es un movimiento ciudadano concebido para respaldar al “binomio de la esperanza” Arauz-Rabascall de la lista 1.

“En dicha campaña, Cortázar apoyó activamente de forma económica, y personal, haciendo desde recorridos en diferentes cantones, acompañando a varios candidatos para asambleístas e incluso sostuvo reuniones con el binomio presidencial de aquella época, Arauz-Rabascall”, dice el informe.
El FPA basó sus conclusiones en las publicaciones en las redes sociales del movimiento ADN. Según sus hallazgos, a Cortázar se lo observa regalando juguetes a niños, gorras, camisetas y pruebas rápidas para la detección de Covid-19, acompañado del exasambelísta procesado en el Caso Metástasis y prófugo de la justicia, Ronny Aleaga.
“De acuerdo con los registros de imágenes y videos publicados por el mismo Movimiento Acción Democrática Nacional (ADN) en sus redes sociales, se puede colegir que existió un apoyo directo a la campaña impulsada por el asambleísta Ronny Aleaga Santos”, reza parte de ese reporte.
En uno de los videos promocionales, con la música de fondo de la campaña del correísmo, se menciona que Aleaga y Cortázar, como director nacional de ADN, gestionaron brigadas médicas para barrios del Guayas.
Este respaldo también fue confirmado por la asambleísta del correísmo, Patricia Núñez, quien agradeció a Cortázar por el apoyo entregado a la campaña de Andrés Arauz, al punto de extenderle una invitación “a seguir trabajando juntos”
Un año después, la plataforma inicial de ADN pasó de manos de Cortázar a Noboa, con una nueva imagen, con la que empezó a recorrer el país hasta que el 13 de octubre de 2022, el Pleno del CNE le otorgó la clave a María Beatriz Moreno Heredia para que acceda a los formularios de recolección de firmas.
Noboa, en el debate de segunda vuelta, no respondió a los cuestionamientos de la candidata correísta, Luisa González, que lo acusó de haberle comprado su movimiento a Cortázar. De hecho, la página web de ADN, ya bajo control de Noboa, redirigía a la cuenta de YouTube del ADN de Cortázar.

Y por si fuera poco, Cortázar tiene a su nombre la marca Acción Democrática Nacional (ADN), de acuerdo al registro de marcas del SENADI. Esa acreditación tiene vigencia plena hasta el 23 de julio de 2031.

DE TODOS LOS COLORES: ADN RECICLA VIEJOS ROSTROS DEL CORREÍSMO, CREO, PSC Y MÁS
De los 66 asambleístas que conforman el bloque de ADN para el periodo 2025-2029, un 42%, o lo que es lo mismo, 28 legisladores, son exmiembros de otros partidos políticos como el Partido Social Cristiano, Pachakutik, Unidad Popular, Revolución Ciudadana, Centro Democrático, Izquierda Democrática, AMIGO, Renovación Total, CREO y Avanza, o incluso fueron autoridades de otros gobiernos.
Por ejemplo, Lucía Jaramillo, quien llegó a la Asamblea en el periodo anterior bajo el cobijo del PSC, se apartó de esa organización y se incorporó a las filas de ADN incluso antes de su reelección. Lo propio Esteban Torres, exjefe de bancada del PSC en el periodo 2021-2023, que en el periodo de transición de Noboa ocupó el viceministerio de Gobierno y es actual asambleísta de ADN para el periodo 2025-2029.

Otro caso es el de Éckener Recalde, quien llegó al Parlamento en 2021 por la Izquierda Democrática, pero se separó de la agrupación tras una denuncia en su contra por supuestos diezmos y en 2023, de la mano de ADN, llegó a la segunda vicepresidencia del Legislativo.
De igual forma Nataly Morillo, quien era persona de confianza de la exministra de Gobierno, María Paula Romo, alcanzó una curul por el movimiento Construye y para este periodo fue reelecta por ADN. De modo análogo, Jorge Chamba y Fernando Jaramillo, ambos exmiembros del movimiento ciudadano Gente Buena, que también se sumaron al oficialismo en el periodo anterior y fueron reelectos.

O Ferdinan Álvarez, quien llegó al Legislativo en 2021 y 2023 con el correísmo, pero desertó tras un conflicto con Jorge Glas. También está el caso del presidente del Parlamento, Niels Olsen, quien fue Ministro de Turismo en el Gobierno del expresidente Guillermo Lasso y se mantuvo en ese cargo en la administración de Noboa, hasta la inscripción de su candidatura como asambleísta.


Y, a pesar de que no perteneció formalmente a las filas de ningún partido, Diana Jácome tiene un pasado como simpatizante del correísmo y exvicepresidenciable del PSC junto a Jan Topic. En el periodo de transición de Noboa, Jácome fue su asesora y delegada de presidencia ante los directorios de las empresas públicas Correos del Ecuador y de Medios Públicos.

Sin mencionar a otros dos viejos rostros del correísmo a los que Noboa también reclutó para su Gobierno: Marcela Holguín, exasambleísta del correísmo y flamante gerente de la Empresa de Medios Públicos, y Fausto Jarrín, exabogado de Rafael Correa y Jorge Glas, que funge como operador político y actúa desde la clandestinidad en beneficio de Noboa.


Jarrín, además, tiene una estrecha relación con Mario Godoy, presidente del Consejo de la Judicatura prorrogado en funciones. Ambos, como lo reveló LA DEFENSA, está conectados por una red de prebendas repartidas a sus amigos y familiares. De tal suerte que la renovación, en los hechos, es un simple membrete.